No crecemos por INCOMPETENCIA!!

Melilla, es la tercera región con más paro de toda la Unión Europea, superando el 34% de desempleo. También lideramos el ranking europeo de paro juvenil en España y en toda Europa, superando el 60% de desempleo entre los jóvenes.

En estos últimos años hemos empeorando y alcanzado cifras históricas que están llevando a muchos melillenses, principalmente jóvenes, a la desesperación y a la falta de expectativas de futuro. ¿Por qué? Sencillamente porque quienes nos Gobiernan, en dos décadas (ni más ni menos!!) han sido incapaces de reformar y modificar nuestra economía local para hacerla productiva, innovadora y capaz de generar empleo y dinamismo económico. En lugar de progresar y adaptarse a las nuevas exigencias y realidades, han preferido seguir viviendo de las subvenciones, esperar a que cada año «papá y mamá Estado» nos envíe dinero y compense la caída de los ingresos de la Ciudad y, con ese dinero, gastarlo en planes de empleo temporales (llevan años en marcha y no han solucionado nada) y en la mayor Agencia de Colocación de Amigos y Familiares del Gobierno, es decir, el «Ayuntamiento» (y no hablemos ya del despilfarro en publicidad, festejos, banquetes institucionales, etc.) Pero el dinero que nos envía «papá y mamá Estado» empieza a mermar. Melilla ha recibido en estos 3 últimos años un 40% menos de inversión del Estado por los recortes del Gobierno Central. Y no hablemos ya de la paralización de obras tan importantes como el nuevo Hospital o la construcción de nuevos centrso educativos.

En 13 años de Gobierno, no han sido capaces de poner sobre la mesa ninguna solución que vaya más allá de subvencionar supuestas políticas de incentivo de la economía que siempre acaban en sonados fracasos. Esto tiene nombres: INCAPACIDAD POLÍTICA, AGOTAMIENTO, FALTA DE IDEAS… Cada presupuesto de la Ciudad es reflejo del inmovilismo económico de quienes gestionan nuestro recursos porque se limitan a parchear la Ciudad, llenar barrigas agradecidas de quienes movilizan y sostienen al Gobierno y subvencionar contrataciones temporales para entretener a una población a la que han acostumbrado a esperar convocatorias de planes de empleo, ya sea por PROMESA o por el INEM, para apaciguar su tensión y desesperación.

Esta situación es insostenible e inaguantable!! Es que ya se está poniendo en riesgo el futuro económico de nuestra Ciudad, el de todos los melillenses!! 8 de cada 10 jóvenes afirma no tener expectativas profesionales y de futuro en Melilla; el número de parados sin formación y cualificación sigue creciendo; quienes terminan sus estudios universitarios no ven salida profesional en su tierra; el fracaso escolar aumenta llevándonos a liderar el ranking nacional y europeo… ¿Por qué? Porque una manada de incompetentes han sido incapaces de invertir bien los 3.000 millones de €uros que han gestionado en estos 13 años. Probablemente sea una cuestión generacional; tenemos un Presidente que ronda los 70 años y que pretende volver a serlo otros 4 años más por sus narices. Y también, cuestión de incompetencia: tenemos el Gobierno más numeroso de todas las autonomías, pero plagado de ineptos, muchos sin formación alguna y que únicamente acreditan haber sido en algún momento de su vida “palmeros de quien les nombra”. Un Gobierno arcaico que aplica las mismas políticas de siempre a problemas que crecen y se agudizan.

Estoy convencido de que Melilla puede dar mucho más de lo que dan sus gobernantes. Podemos generar riqueza quitándonos las vendas, los trapos viejos y las cadenas que nos han puesto para limitar y ocultar durante décadas las numerosas oportunidades económicas que tenemos: innovación e investigación, formación y cualificación, industria y turismo asequible y accesible, comercio moderno y accesible a nuestro entorno, inversiones públicas rentables y dinamizadoras, transportes modernos, ágiles y asequibles, fronteras seguras y rápidas… Sólo depende de una cosa: que los melillenses no nos resignemos a más de lo mismo y echemos de una patada a tantos incompetentes que solo saben enriquecerse mientras empobrecen a nuestra Ciudad. Somos 85.000 habitantes, 85.000 almas que vivimos día a día en nuestra Ciudad y que no estamos orgullosos de ser la Ciudad con mayor índice de paro, de fracaso escolar y con la mayor tasa de exclusión social. Merecemos una Melilla mejor.

 

EN MANOS DE INCOMPETENTES…

Si cubrieran todas las plazas que de verdad se necesitan en nuestros Colegios e Institutos Públicos,

Si cubren todos los puestos que hacen falta en los Centros de Salud y en el Hospital Comarcal,

Si dejaran de bloquear la sustitución de jubilaciones y bajas en el sector público,

Si completaran la plantilla necesaria en Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en lugar de traer grupos temporales de agentes,

Si dejaran de paralizar grandes obras para nuestra Ciudad como el Hospital Universitario o el nuevo Centro Educativo en Jardín Valenciano,

Si construyeran el nuevo Cuartel de la Policía Local y aumentaran efectivos de Policía y Bomberos,

Si dejaran de recortar unidades en el Servicio de Ambulancias cuando Melilla necesita al menos el doble,

Si dejaran de permitir que empresas declaren más del 40% de beneficio en los contratos y servicios concedidos por la Ciudad Autónoma…

Si acabaran con los presupuestos inflados en obras, los cientos de modificados de última hora y los gastos innecesarios…

Entonces, probablemente, estaríamos hablando de mejores expectativas económicas y de vida en nuestra Ciudad y mucho, mucho menos PARO. Pero lamentablemente, las prioridades de nuestro Gobierno son otras, como gastarse 3.000.000 € en cargos de gobierno y personal de confianza o más de 2.400.000€ en publicidad y propaganda o más de 2.200.000 € en festejos.

Es triste que el problema de esta Ciudad no sea otro que el de sus gobernantes, aunque ellos nos hagan creer día a día que el problema es nuestra peculiaridad geográfica o nuestras «limitaciones de desarrollo económico» o eso de que falta dinero (en 12 años han gestionado más de 3 mil millones de €uros en Melilla!!)… No señor!! el problema no es ese, el problema es la INCAPACIDAD, LA FALTA DE IDEAS Y EL ACOMODAMIENTO PERSONAL DE QUIENES NOS GOBIERNAN DESDE HACE DOS DÉCADAS!! EL PROBLEMA NO ES MELILLA, SON USTEDES SEÑORES DEL GOBIERNO!!

MÁS PARO, NINGUNA SOLUCIÓN A LA VISTA…

Junio nos da malas cifras. El paro se dispara en Melilla en más de 600 personas. Esta cifra se acumula al paro récord que ronda ya los 13.500 melillenses desempleados. Las cifras son objetivas y difíciles de ocultar, por muchas distracciones o manipulaciones que se ejerzan. Cifras que ponen de manifiesto unos síntomas que están poniendo en jaque nuestro futuro, que paralizan el progreso de la Ciudad y que elimina cualquier atisbo de expectativas de mejora: el inmovilismo y la incapacidad de quienes nos gobiernan. Nula capacidad de resolver los clásicos problemas como la Frontera, el Transporte… se suma a la falta de ideas, iniciativas y capacidad de innovar en nuestra Ciudad, amén del enorme recorte de las inversiones del Gobierno de España en nuestra Ciudad (Hospital nuevo paralizado, 60 profesores menos, cierres de centros de salud por las tardes, etc.).

El panorama es desalentador y tiene mucho que ver con unos dirigentes y gobernantes políticos que no han puesto sobre la mesa fórmulas para cambiar y dinamizar nuestra economía. Siempre recurren a lo mismo, parches como los Planes de Empleo que nunca deben ser el eje central de una economía sino un medida complementaria. Quienes gestionan el dinero de todos, se han convertido en una máquina de generar frustración y desesperación.

CONSECUENCIAS: estancamiento económico, desesperación y dramas familiares. 8 de cada 10 jóvenes no ve expectativas de futuro en Melilla.

RESPONSABLES: gobiernos e instituciones.

SOLUCIÓN: CAMBIO!!

 

ESTAMOS A TIEMPO…

Hoy me he reunido con un comerciante melillense que siempre ha trabajado en Melilla y lucha día a día por sacar adelante su empresa. Hacía tiempo que queríamos charlar, pero la salud de mi padre y mi idea de emprender un proyecto, lo ha aplazado hasta hoy. Palabras como: cansado, desesperado, harto… era lo que me transmitía a la hora de referirse a todos los dirigentes con los que se había reunido hasta la fecha: Delegado del Gobierno, Presidente de la Ciudad, representantes políticos de todos los colores, etc. Una frase me conmovió: “están matando a mi Ciudad cuando podemos hacer muchas cosas que levantarían nuestra economía”. Y no le falta razón, ni un ápice de razón. Le comenté que la están matando a base de no hacer nada nuevo, de no ser capaces de innovar y tomar decisiones valientes. El INMOVILISMO se ha adueñado de quienes nos gobiernan y dirigen desde hace muchos año. Prefieren que sigamos subsistiendo de las subvenciones y el autoconsumo (cada vez menor) mientras nuestro entorno evoluciona y progresa.

Quería compartir su reflexión conmigo, de un melillense a otro preocupado por la deriva política, económica y social de nuestra tierra. Al final, concluimos que hay espacio para la esperanza, hay oportunidades y tiempo para evitar avanzar hacia el precipicio. Tenemos potenciales como nuestros jóvenes, cada vez mejor formados, nuestro entorno sigue creciendo económicamente y sigue viendo a Melilla como un referente en servicios, etc. Sólo hace falta valentía y responsabilidad y, después de 14 años, sólo puede venir desde el cambio.

Debemos dejar de un lado la anestesia colectiva, insuflada a base de subvenciones y miedos ya superados. Mientras sigamos haciendo un análisis autocomplaciente o de resignación ante nuestras posibilidades sin ir más allá de enfatizar permanentemente nuestras “limitaciones”, estamos condenados a la incertidumbre, a veces aplacada por la respuesta que nos hemos fabricado nosotros mismos “hay que vivir el día a día y luego ya veremos” y que no resuelve lo que tarde o temprano habrá que abordar seriamente: nuestro futuro socio-económico.

Hay elementos y ámbitos de actuación que hay que reactivar: una ordenación urbana que apueste por el impulso económico, abandonar la idea de un Turismo que compita con la Costa del Sol sino que rentabilice el auge turístico de nuestro entorno, mejorar irremediablemente la fluidez en nuestras fronteras, acordar entre todos un modelo de transportes asequible y accesible, impulsar la innovación empresarial y financiera de Melilla, incluir en las nuevas perspectivas económicas al elevado número de prados sin formación, convertir a Melilla en una gran “Plataforma” comercial que oferte alternativas de consumo, ocio y servicios de calidad para nuestro entorno, hacer uso racional e invertir de forma inteligente los fondos públicos que recibimos de Europa y el resto de España, etc.

Es posible, muy posible, depende de nosotr@s.